Así­ luce una motocicleta eléctrica después de 100.000 km distribuidos

El rendimiento de la baterí­a, el punto más sensible y sobre el que las eléctricas suscitan mayores dudas, también ha sido sorprendente. Después de todo el uso mencionado, encontramos datos que confirman que aún están al 85% de su capacidad cuando eran nuevos. Es decir, la pérdida de autonomí­a es del 15% después de todo este uso y tiempo. Detrás de estos grandes números está, según los ingenieros de Silence, el correcto proceso de recarga de las propias baterí­as, y este punto parece decisivo en cuanto a su vida útil y capacidad.

Precisamente este proceso de recarga consiste en una recarga completa por la noche en las instalaciones de ARA VINC, para que siempre salgan a entregar con toda la capacidad disponible. De hecho, la empresa barcelonesa garantiza que con esta carga es más que suficiente para que la moto pueda viajar todo el dí­a, alcanzando los 110 km diarios, aunque de media en la flota son 100.

Aparte del daño estético que sufrieron en ese momento, estos patinetes eléctricos no tuvieron otros fallos o averí­as y también fueron efectivos en lo que podemos considerar el punto fuerte de los vehí­culos eléctricos en la actualidad: la ciudad. Hay que decir que de las 25 motos que componen la flota inicial, ya que ahora han adquirido otras 30, la que ha recorrido menos de 60 mil kilómetros se encuentra sin mayor mantenimiento que el recambio de piezas de desgaste: neumáticos y pastillas.